En el municipio de Urique en Chihuahua, asesinaron a los padres jesuitas Javier Campos Morales y Joaquín Mora Salazar y a un civil en el interior de la iglesia de Cerocahui. De acuerdo con las primeras investigaciones, presuntos integrantes del crimen organizado los acribillaron al irrumpir en el templo.
El rector de la Universidad Iberoamericana Ciudad de México-Tijuana, Luis Arriaga Valenzuela, dijo que se suman a la indignación que tiene la Provincia Mexicana de la Compañía de Jesús ante los indignantes hechos.
“Exigimos una atención inmediata a la grave situación de inseguridad que prevalece en la región (…) Demandamos que se adopten medidas de protección para todas las personas de las comunidades de Cerocahui en Chihuahua que se encuentran expuestas a un patrón de violencia incesante y constante”.
Agregó que el crimen contra los sacerdotes no debe quedar impune, además de que exigen que regresen los cuerpos pues luego de asesinarlos, se llevaron los cuerpos. Explicó también que las labores que realizaba eran estrictamente pastorales propias de su labor como sacerdotes.
“Eran padres muy queridos en la Tarahumara y esto es lo que más nos duele. Personas que son y que han mostrado una honradez y un trabajo muy serio pastoral, muy queridos en la comunidad y que pase esta desgracia nos pesa mucho. Nuestra comunidad universitaria también comparte este dolor de las familias y desde luego estamos tratando de que este caso no se vuelva a repetir y que no exista este patrón de impunidad tan común en nuestro país”.
Luis Arriaga realizó un llamado a las comunidades para que los ayuden a recuperar los cuerpos pues si alguna persona tiene información de su ubicación que se ponga en contacto con la Fiscalía del Estado.
“No son hechos aislados, la sierra Tarahumara como muchas otras regiones enfrenta también condiciones de violencia y olvido que no han sido revertidas”, concluyó.
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