Una imagen de ataúdes y el mensaje: “Estamos listos para tu desorden de fin de año: ya adquirimos más bolsas negras para agilizar el funeral” son los contenidos de una de las piezas publicitarias que circula en vallas de los municipios de Caldas y a través de las redes sociales de la Territorial de Salud. Este tipo de mensajes ha generado toda una polémica en el departamento.
Se trata de una campaña publicitaria, cargada de anuncios directos y sin concesiones, a la vista de todos en vallas y que circula desde hace dos semanas en medios de comunicación para promover y evitar las aglomeraciones, fiestas y otros escenarios de riesgo que incrementen el número de contagiados por Covid-19, virus que ya deja un saldo de 477 fallecidos en este departamento cafetero, que es la segunda región del país con el mayor número de ancianos.
Esas razones, más la indisciplina social, empujaron al gobernador, Luis Carlos Velásquez, a cambiar las palabras amables y seductoras de las campañas anteriores sobre la pandemia por mensajes «ácidos» y «al hígado».
«Queríamos hacer una campaña ácida, con ataúdes literalmente en las vallas y que creo que el gran logro de la campaña en Caldas es que la Covid-19 dejó de ser paisaje como se había vuelto»
Luis Velásques, gobernador de Caldas
La campaña se organizó sin el apoyo de estrategas en comunicaciones, ni se acudió a psicólogos o sociólogos para pensar en los mensajes de la campaña, «simplemente quisimos decir que estamos listos» y acudieron a la manera de hablar directa de esa región del país caracterizada por el cultivo de café.
El mandatario describió que durante siete meses su administración realizó una «campaña rosa, amigable», que pretendía generar «conciencia» entre los habitantes del departamento, pero una vez concluyó la cuarentena y reabrieron los comercios, los ciudadanos se relajaron en sus cuidados.
A la falta de distanciamiento social, que se requiere frente a la presencia de la peste, se sumaron recientemente las fiestas en balnearios y lugares de rumba en el departamento, lo que alertó a las autoridades locales a iniciar una campaña para evitar que las festividades de fin de año se conviertan en una eventual tragedia.
«Nuestro gran temor es que ahora en las fiestas de Navidad los adultos mayores se mezclen con sus familias», apuntó.
Afanado, el gobernador explicó que las proyecciones para el pico de la pandemia modeladas por el ministerio de Salud proyectaba unos 16 mil contagiados, pero ahora las estimaciones apuntan a más de 56 mil infectados en enero.
A la fecha Caldas registra un total de 27,852 contagiados, de los cuales 25,594 ya están recuperados, mientras que se reportaron 523 decesos y están hospitalizados 591 personas, según las estadísticas del Instituto Nacional de Salud.
Algunos ciudadanos alegan que es un mensaje muy fuerte, directo y hasta irrespetuoso, mientras que otros la defienden asegurando que responde a la realidad que afronta el departamento que pasará fin de año en pleno pico de la pandemia.
“La campaña ‘de prevención’ es ofensiva. Estigmatiza a quienes se contagien de coronavirus y no viene acompañada de pedagogía alguna. Es perversa en el peor sentido, además, es como si no hubiera habido ya enfermos de coronavirus en la misma entidad”, indica uno de los comentarios de usuarios en redes sociales.
«Hemos recibido mensaje de apoyo de médicos, de gerentes de hospitales, de rectores de universidades, incluso otros amigos gobernadores se quieren sumar a la campaña», aseguró el mandatario regional.