El huracán “Otis” dejó incomunicado al puerto de Acapulco, Guerrero, tras su impacto, con carreteras incomunicadas, cortes de energía eléctrica, inundaciones, así como daños a viviendas y negocios.
«Hasta ahora no tenemos datos sobre pérdida de vidas humanas, pero no hay comunicación (…), sí daños materiales, ruptura de caminos; la propia autopista llegando a Acapulco tiene derrumbes», afirmó el presidente Andrés Manuel López Obrador durante su conferencia matutina en Palacio Nacional.
“Otis” tocó tierra, como categoría 5, la madrugada de este miércoles con vientos máximos de 250 km/h. Después se debilitó a categoría 1 con vientos sostenidos de 130 km/h y desplazamiento a 17 km/h.
López Obrador señaló que se trabaja para restablecer la comunicación en la zona afectada, en tanto un convoy con ayuda humanitaria, encabezado por los secretarios de la Defensa, la Marina, de Seguridad y de Comunicaciones, partió hacia el puerto por tierra.
«Lo urgente es atender a la población afectada, no tenemos todavía la evaluación de daños porque no hay comunicación», sostuvo Laura Velázquez, coordinadora nacional de Protección Civil.
«Incluso el sector naval y el sector de la Sedena resultaron afectados seriamente», dijo.
El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) informó que “Otis” deja a su paso precipitaciones con descargas eléctricas.
Alertó de lluvias intensas de 75 a 150 mm en Michoacán y el suroeste del Estado de México.
Informó que en la franja costera se presenta oleaje de tres a cinco metros de altura y marea de tormenta, y las comunicaciones continúan suspendidas tras el derribo de la telefonía celular y postes de energía eléctrica.
Los riesgos para la población son «deslaves, incremento en niveles de ríos y arroyos, desbordamientos e inundaciones», advirtió el SMN.
El organismo estableció zona de prevención por efectos de tormenta tropical desde Punta Maldonado hasta Acapulco.
Reportan cuantiosos daños por “Otis” en Acapulco, que está incomunicado
